NUEVA YORK.- El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, visitará
esta semana Arabia Saudita e Irán como parte de sus gestiones para
detener el conflicto en el país levantino, señaló hoy un portavoz de la
organización.
En declaraciones a la prensa, el portavoz del Secretario General de
Naciones Unidas, Stephane Dujarric, precisó que la estancia del
diplomático busca evitar que la crisis en curso entre Riad y Teherán
afecte el proceso dirigido a poner fin a los enfrentamientos en Siria,
responsables de más de 250 mil muertos y 11 millones de desplazados en
casi cinco años.
"De Mistura cree que las tensiones entre ambos países resultan preocupantes, y urge asegurarse de que no generen una adversa reacción en cadena en la región", dijo.
Arabia Saudita e Irán forman parte del llamado grupo de apoyo internacional para Siria, el cual tras reuniones en Viena y Nueva York, durante el último trimestre de 2015, hizo posible la resolución 2254 del Consejo de Seguridad, iniciativa adoptada el mes pasado que representa una hoja de ruta para acabar el conflicto.
Riad y Teherán viven una escalada en sus tensas relaciones, después de que el Reino Wahabita ejecutara bajo cargos de terrorismo al clérigo chiita Sheikh al-Nimr, lo que generó protestas en el Estado persa, donde fue asaltada la embajada saudita.
Se espera que este mes los actores de la crisis siria, el Gobierno y los opositores, conversen en Ginebra, Suiza, un paso clave para detener las hostilidades.
De Mistura señaló hace unos días el 25 de enero como fecha para el comienzo de las pláticas, las cuales deben estar acompañadas de un alto el fuego nacional, de acuerdo con lo plasmado por el Consejo de Seguridad de la ONU en su resolución 2254.
"De Mistura cree que las tensiones entre ambos países resultan preocupantes, y urge asegurarse de que no generen una adversa reacción en cadena en la región", dijo.
Arabia Saudita e Irán forman parte del llamado grupo de apoyo internacional para Siria, el cual tras reuniones en Viena y Nueva York, durante el último trimestre de 2015, hizo posible la resolución 2254 del Consejo de Seguridad, iniciativa adoptada el mes pasado que representa una hoja de ruta para acabar el conflicto.
Riad y Teherán viven una escalada en sus tensas relaciones, después de que el Reino Wahabita ejecutara bajo cargos de terrorismo al clérigo chiita Sheikh al-Nimr, lo que generó protestas en el Estado persa, donde fue asaltada la embajada saudita.
Se espera que este mes los actores de la crisis siria, el Gobierno y los opositores, conversen en Ginebra, Suiza, un paso clave para detener las hostilidades.
De Mistura señaló hace unos días el 25 de enero como fecha para el comienzo de las pláticas, las cuales deben estar acompañadas de un alto el fuego nacional, de acuerdo con lo plasmado por el Consejo de Seguridad de la ONU en su resolución 2254.
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