El nuevo jefe de la diplomacia saudí es Ibrahim Al Asaf, que fue
titular de Finanzas hasta 2016 y reemplaza a Adel al Yubeir, que pasa a
ser ministro de Estado de Exteriores (viceministro), informaron hoy
medios oficiales.
Al Asaf estuvo entre las decenas de detenidos en la
gran operación contra la corrupción que llevaron a cabo las autoridades
saudíes en noviembre de 2017, en la que se vieron involucrados
príncipes, políticos y grandes empresarios.
Los
acusados fueron retenidos durante semanas en un hotel de Riad hasta que
llegaron a acuerdos financieros u otro tipo de arreglo con el Gobierno, y
la mayor parte salieron en libertad en enero.
Después de ese caso, Al Asaf fue nombrado ministro de Estado, esto es,
miembro del Consejo de Ministros saudí, que está encabezado por el rey.
Al Asaf lideró la delegación saudí que acudió al Foro Económico
Mundial que se celebró en Davos (Suiza) en enero de 2018, poco después
de haber sido puesto en libertad.
Por su parte, el
ministro de Exteriores saliente, Al Yubeir, ha sido uno de los
principales exponentes del reino en los pasados años y defensor de sus
políticas, tanto en la guerra del Yemen como en el caso Khashoggi.
El periodista crítico con la Casa Real saudí fue asesinado el 2 de
octubre en el interior del consulado en Estambul, tal y como admitió
Arabia Saudí posteriormente, aunque las autoridades han negado en todo
momento la implicación de altos cargos del reino, incluido el príncipe
heredero, Mohamed bin Salman.
Al Asaf actualmente está en la junta directiva de la poderosa compañía estatal de petróleo Aramco.
El
saliente Al Yubeir, de 56 años y exembajador de Arabia Saudí en
Washington, había sido el encargado desde 2015 de defender las políticas
del reino, sobre todo su polémica intervención militar en la guerra del
Yemen desde marzo de ese año.
Su inglés perfecto, su edad y su actitud placada le convirtieron en una figura respetada internacionalmente,
pero su imagen se vio afectada por el caso Khashoggi, tras asegurar
categóricamente que la Casa Real y el príncipe heredero Mohamed bin
Salman no estaban involucrados en el asesinato del periodista disidente.
El
príncipe, que es también ministro de Defensa y viceprimer ministro,
permanece en sus cargos, a pesar de las acusaciones de estar detrás de
la muerte de Khashoggi, tal y como aseguró el Senado de Estados Unidos a
mediados de diciembre, señalando al hijo del rey como "responsable" del
asesinato.
El monarca también reemplazó algunos altos cargos de seguridad del reino, como el director de la Seguridad General, Saud bin Abdelaziz Hilal, que fue sustituido por Jaled bin Qarar al Harby.como el director de la Seguridad General, Saud bin Abdelaziz Hilal, que fue sustituido por Jaled bin Qarar al Harby. Asimismo,
nombró como nuevo ministro de la Guardia Nacional (órgano encargada de
la protección de la familia real) a Abdalá bin Bandar bin Abdelaziz,
nacido en 1986, y a Mosaid bin Mohamed al Aiban como nuevo consejero
real de Seguridad Nacional, aunque este último ocupa otros varios cargos
en el Gobierno y la Corte Real.
Estos
cambios relacionados con la seguridad siguen a los ejecutados tras la
admisión de la muerte de Khashoggi en el consulado saudí por parte de
Riad, cuando fue sustituido el vicedirector de la Inteligencia y fue
ordenada la reestructuración de esa agencia, un proceso supervisado por
el propio Bin Salman.
Hoy también fue designado por decreto real un nuevo ministro de Información, Turki al Shabana, nacido en 1964 y procedente del mundo de la televisión.
Ocupó
varios cargos en el canal MBC y fue presidente de la gran empresa de
entretenimiento Rotana, propiedad del príncipe Walid bin Talal, el cual
estuvo también implicado en el gran caso de corrupción de 2017.
Mientras,
el nuevo ministro de Educación es Hamad al Sheij, que dio sus primeros
pasos en el ámbito académico, luego se dedicó al trabajo administrativo
hasta que alcanzó el puesto de viceministro de Educación y,
posteriormente, el de consejero de la Corte Real.
El
rey Salman también nombró hoy a dos nuevos presidentes para las
Autoridades de Deportes y Turismo, Abdelaziz bin Turki al Faisal y Ahmad
al Jatib, respectivamente.
Cabe
destacar que el joven Al Faisal, nacido en 1983, sustituye a Turki al
Sheij, uno de los hombres más cercanos a Mohamed bin Salman, que pasa a
presidir la Autoridad de Ocio, ente encargado de las nuevas actividades
que ya no están prohibidas en el reino, como las salas de cine.
Precisamente, el príncipe heredero ha conseguido ofrecer al mundo una imagen de modernización y aperturismo gracias
a algunas reformas introducidas desde que fue nombrado a mediados de
2017, como la apertura de los estadios a las mujeres o el levantamiento
del veto a conducir para ellas.
Sin embargo, el caso Khashoggi dejó al descubierto la persecución de los opositores y
críticos con las políticas del reino, incluso aquellos exiliados como
era el caso del columnista, que criticó a Bin Salman y el poder de que
este goza en Arabia Saudí.