sábado, 18 de junio de 2016

Riad otorga el primer permiso comercial sin socio local a una empresa de EEUU

RIAD.- Las autoridades de Arabia Saudí han otorgado el primer permiso para invertir en el ámbito del comercio en el país con un cien por cien de propiedad y sin necesidad de contar con un socio local a la compañía química estadounidense Dow Chemical.

La Corporación General para la Inversión (institución estatal saudí) informó en un comunicado, citado por la agencia de noticias saudí, SPA, de que el vicepríncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, entregó directamente la autorización al presidente ejecutivo de Dow Chemical, Andrew N. Liveris, durante su actual visita a EEUU.
"La presencia de Dow Chemical en Arabia Saudí contribuirá en gran manera a aumentar la rentabilidad y calidad en el sector de la industria petroquímica en el país", destacó la nota.
Según un comunicado publicado en la página web de la compañía, Dow Chemical es el inversor más importante en Arabia Saudí y mantiene diversas filiales conjuntas en la región.
La empresa cuenta con 500 empleados en Arabia Saudí y esta nueva licencia comercial tiene previsto crear más oportunidades laborales, añadió la nota.
Dow Chemical -que opera en los ámbitos de la petroquímica, la manufactura, la innovación y la investigación- obtuvo el año pasado unos ingresos de 49.000 millones de dólares y empleó a cerca de 49.500 personas.
La autorización del Gobierno fue concedida cuatro días después de que el Gobierno aprobara las normas y requisitos necesarios para abrir el país a todas las empresas extranjeras que trabajan en el comercio al por mayor y al por menor, incluso a las que venden los productos de otras firmas, como es el caso de los supermercados.
La aprobación por parte del Gobierno saudí a la inversión de compañías extranjeras en el campo del comercio al por mayor y menor fue adoptada en una reunión presidida por el rey saudí Salman bin Abdelaziz y se enmarca en el Proyecto de la Visión de Arabia Saudí 2030.
El monarca saudí, durante su visita a EEUU del año pasado, abrió las puertas a las compañías extranjeras para que trabajen con filiales en Arabia Saudí, con una propiedad total sin el requisito de un socio o representante saudí,
La decisión del Gobierno superó el anuncio del rey, ya que la nueva iniciativa incluye también a las empresas que venden los productos de otras compañías.
La legislación saudí condiciona a los inversores extranjeros la propiedad mixta con un socio saudí en algunas actividades -hasta ahora también el comercio- y les prohíbe trabajar en los sectores de la minería, prospección de petróleo, medios de comunicación y servicios militares.
El "Proyecto de la Visión de Arabia Saudí 2030", aprobado por el Gobierno el 25 de abril pasado, pretende reducir la dependencia del petróleo y desarrollar las inversiones.
Entre sus objetivos está aliviar las restricciones vinculadas a la propiedad y la inversión extranjera en el ámbito mayorista y minorista para atraer a las marcas comerciales regionales e internacionales y crear puestos laborales en ese sector.