jueves, 25 de abril de 2019

Irán cree que Trump no quiere una guerra pero sostiene que puede ser arrastrado a una


NUEVA YORK.- El ministro de Relaciones Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, no cree que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quiera una guerra con Irán, pero dijo que el republicano podría ser arrastrado a un conflicto. 

“No creo que él quiera una guerra”, dijo Zarif en una entrevista con Reuters en la misión iraní ante Naciones Unidas en Nueva York. “Pero eso no excluye que pueda ser arrastrado a una”.
Zarif dijo que el llamado “equipo B”, que incluye al asesor de seguridad John Bolton, y el conservador primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, podrían incitar a Trump a entrar en un conflicto con la república islámica.
“Aquellos que han diseñado las políticas que se están aplicando no quieren simplemente una solución negociada. Pero permítanme aclarar que Irán no está buscando una confrontación, aunque se defenderá”, señaló el funcionario.
En comentarios un tanto crípticos, Zarif también advirtió sobre la posibilidad de que haya gente que pueda intentar “planear un accidente” para desencadenar una crisis más amplia.
Las tensiones entre Teherán y Washington han aumentado desde que Trump retiró el año pasado a Estados Unidos de un acuerdo nuclear internacional con Irán y comenzó a aumentar las sanciones en su contra.
A principios de este mes, Washington puso en una lista negra a la Guardia Revolucionaria iraní y exigió a los compradores de petróleo de Teherán que suspendan sus importaciones en mayo ya que en caso contrario afrontarán sanciones.
La decisión estadounidense sobre la Guardia Revolucionaria marca la primera vez que una nación califica a las fuerzas armadas de otro país como una organización terrorista.
Zarif sostuvo que Irán actuará con “prudencia” en respuesta a lo que considera políticas peligrosas de Estados Unidos. Como ejemplo, dijo que su país todavía permite que los buques de guerra de Estados Unidos pasen por el Estrecho de Ormuz, la arteria petrolera más importante del mundo.
El canciller catalogó como “absurda” la decisión sobre la Guardia Revolucionaria, pero sugirió que Irán no planea responder militarmente a menos que Estados Unidos cambie las reglas que guían su interacción con las fuerzas iraníes. El Ejército estadounidense no ha sugerido que su comportamiento vaya a cambiar.
“Ejerceremos prudencia, pero eso no significa que si Estados Unidos cambiara las reglas del juego o cambiara las reglas de su compromiso, se saldrá con la suya”, remarcó.
El presidente iraní, Hassan Rouhani, y algunos comandantes militares de alto rango han amenazado con interrumpir los envíos de petróleo de los países del Golfo si Washington intenta ahorcar las exportaciones de crudo de Teherán.
El Estrecho de Ormuz, por donde se pasa un tercio del petróleo transportado por mar del mundo, conecta a los productores de crudo de Oriente Medio con los mercados de Asia-Pacífico, Europa y América del Norte.
Cuando se le preguntó si los buques de guerra de Estados Unidos todavía podían pasar por el Estrecho de Ormuz, el veterano diplomático que ha sido ministro de Relaciones Exteriores durante más de seis años, dijo: “Pueden atravesarlo”.
“Si Estados Unidos desea seguir observando las reglas del juego, los canales de comunicación, los protocolos actuales, entonces, a pesar del hecho de que consideramos la presencia de Estados Unidos en el Golfo Pérsico como inherentemente desestabilizadora, no vamos a tomar ninguna acción”, señaló.

El petróleo de Texas baja un 1 % y cierra en 65,21 dólares el barril

NUEVA YORK.- El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) bajó este jueves un 1 % y cerró en 65,21 dólares el barril, un descenso que continúa la reacción del mercado ante el inesperado ascenso en las reservas estadounidenses de crudo anunciado ayer.

Al final de las operaciones a viva voz en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en junio, el nuevo mes de referencia, restaron 68 centavos respecto a la sesión previa.
El descenso continúa por segunda jornada consecutiva después de que los máximos establecidos el martes, cuando el "oro negro" tejano alcanzó su máximo en el último medio año, debido a la preocupación del mercado por la reducción de la oferta.
Ayer miércoles, la Administración de Información de Energía reportó que la semana pasada se produjo un alza de 5,5 millones de barriles en las reservas petrolíferas estadounidenses, por encima de las expectativas más moderadas de los analistas, que intuían un crecimiento de 1,3 millones de barriles.
Al mismo tiempo, las reservas de gasolina cayeron en 2,1 millones de barriles, una cantidad que superó las expectativas.
Las autoridades señalaron también que la producción de EE.UU., el mayor proveedor de petróleo mundial en la actualidad, llegó la semana pasada a un récord de 12,2 millones diarios.
En el mercado pesaba también la decisión de Polonia y Alemania de suspender las importaciones de crudo ruso a través del oleoducto de Druzhba, debido a la contaminación de una tubería que envía en torno a 1 millón de barriles diarios, el equivalente al 1 % de la demanda global.
El alza de los precios de este lunes y martes fue una reacción a la decisión de la Casa Blanca de poner fin a sus exenciones a varios países importadores de petróleo iraní.
Estados Unidos amenaza así con sanciones a países como China, India o Turquía si continúan comprando petróleo iraní, al suspender la prórroga otorgada hace seis meses en un recrudecimiento de la presión sobre Teherán, con el consiguiente nerviosismo en los mercados globales.
Además de China, India y Turquía, la lista de los países que aún operan con el crudo iraní la completan Corea del Sur, Japón, Taiwán, Grecia e Italia.
Los contratos de gasolina con vencimiento en mayo restaron menos de un centavo, hasta 2,12 dólares el galón, y los de gas natural, con vencimiento el mismo mes, sumaron cinco, hasta 2,51 dólares por cada mil pies cúbicos.

El crudo Brent sube un 0,38 %, hasta 74,78 dólares

LONDRES.- El barril de petróleo Brent para entrega en junio abrió hoy al alza en el mercado de futuros de Londres y cotizaba a 74,78 dólares, un 0,38 % más que al cierre de la jornada anterior.

Al inicio de la sesión de este jueves el barril de petróleo Brent superó los 75 dólares por primera vez en 2019, después de que parte de las exportaciones de crudo ruso se suspendieron por dudas sobre su calidad, en un momento en que Estados Unidos se prepara para endurecer las sanciones sobre Irán.
Los futuros del crudo Brent subían 0.87 por ciento, a 75.22 dólares por barril, y el petróleo de referencia en Estados Unidos, el West Texas Intermediate, en tanto, avanzaba 0.90 por ciento, a 66.12 dólares por barril.
Sin embargo, en el resto de la jornada los futuros del petróleo de referencia en Europa fueron recortando parte de sus ganancias y rompieron a la baja el nivel de 75 dólares, para terminar con un retroceso de 0.22 centavos, igual a 0.3 por ciento, en 74.35 dólares por barril.
En tanto, el petróleo crudo referente en la Unión Americana con vencimiento a futuro cerró con una caída de 0.68 centavos, igual a 1.03 por ciento, en 65.21 dólares por tonel, vulnerando el nivel de 66 dólares por cada barril.
Polonia y Alemania suspendieron las importaciones de crudo ruso a través del oleoducto Druzhba, citando una mala calidad del petróleo. Fuentes comerciales dijeron que República Checa también detuvo las compras.
El oleoducto puede enviar hasta un millón de barriles por día (bpd), o 1 por ciento de la demanda mundial de crudo, de los cuales está suspendido el flujo de alrededor de 700.000  barriles diarios.
Los intentos de Estados Unidos por reducir las exportaciones de petróleo iraní a cero también impulsaban los precios del crudo.
Estados Unidos dijo esta semana que pondrá fin a todas las exenciones a las sanciones contra Teherán, el tercer productor más grande de la OPEP, exigiendo a los países que detengan las importaciones de petróleo desde Irán a partir de mayo o enfrentarán las sanciones de Washington.
Por el lado de la oferta, la producción de crudo de Estados Unidos ha aumentado en más de dos millones de bpd desde principios de 2018, a un récord de 12.2 millones de bpd en la actualidad, lo que le convierte en el mayor productor de petróleo del mundo por delante de Rusia y Arabia Saudita.

El gobierno polaco da luz verde a la ampliación de su terminal de gas licuado

VARSOVIA.- El gobierno polaco ha dado luz verde a la ampliación de la terminal de gas natural licuado (LPG) en Swinoujscie, en el norte de Polonia, a orillas del Mar Báltico, una instalación que simboliza la aspiración polaca de lograr la independencia energética de Rusia, principal suministrador de carburante hasta ahora.

"La ampliación de la terminal de Swinoujscie ayudará a diversificar las fuentes de suministro de gas natural y mejorará la seguridad energética del país y de las repúblicas bálticas", afirmó hoy el ministro de Energía polaco, Krzysztof Tchórzewski.
Los trabajos para ampliar la capacidad de la terminal, inaugurada en 2015, están financiados por la Unión Europea a través de sus fondos de desarrollo regional (con una dotación que puede alcanzar los 128 millones de euros).
La terminal de LPG de Swinoujscie es la más grande en la región, y hasta aquí llegan los barcos metaneros cargados con gas licuado procedente de Estados Unidos, país con el que Varsovia firmó el pasado año acuerdos para recibir suministros durante los próximos 20 años.
Actualmente la empresa gasista pública polaca, PGNiG, importa anualmente más de 10.000 millones de metros cúbicos de gas natural procedente de Rusia en virtud de un acuerdo con la gasista rusa Gazprom que finaliza en el año 2022.
Varsovia confía en que los suministros a la terminal de Swinoujscie, junto con el gasoducto que conectará Polonia con la plataforma noruega, puedan garantizar al país centroeuropeo la independencia de los combustibles importados de Rusia para el 2022.

El precio del barril OPEP se mantiene estable en 73,43 dólares

VIENA.- El barril de referencia de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) cotizó el miércoles a 73,43 dólares, sólo seis centavos más que la jornada anterior, informó hoy en Viena el grupo energético.

Con esa mínima apreciación del 0,08 %, el barril OPEP ha ralentizado su pronunciada tendencia al alza de los últimos días, motivada, según los analistas, por la decisión de Washington de poner fin a partir de mayo a la exenciones a las sanciones por la importación de crudo iraní que beneficiaban a ocho países.
Tras los fuertes encarecimientos de los últimos días, el precio medio del crudo OPEP en lo que va de mes es de 70,42 dólares, un 6 % más que el promedio de marzo.

La presión de EE.UU. sobre Irán eleva el petróleo hasta su máximo de este año

LONDRES.- La renovada presión de Estados Unidos para limitar las exportaciones iraníes y una mejora en la perspectiva del crecimiento de la demanda global han elevado el precio del petróleo hasta su máximo nivel de este año.

El crudo Brent, de referencia en Europa, se ha acercado esta semana a la barrera de los 75 dólares por barril, mientras que el Texas (WTI) ha rebasado los 65 dólares, cotas que ambos habían perdido hace cerca de seis meses.
El endurecimiento de las medidas estadounidenses contra Teherán, que se verá obligado a retirar del mercado al menos medio millón de barriles diarios en el segundo trimestre, ha apuntalado, según los analistas, la tendencia al alza que ha registrado el crudo desde principios de 2019.
La escalada del precio puede favorecer a las economías de los grandes productores, cuyas exportaciones superan las importaciones, como Arabia Saudí, Rusia y Emiratos Árabes Unidos, pero golpea las finanzas de los países con recursos petrolíferos limitados, como muchos de los Estados europeos.
Una de las llaves para frenar la subida de los precios la tienen precisamente Riad, como líder de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), y Moscú, aliado externo del cártel.
Ambas capitales han impulsado desde principios de año un recorte de producción conjunta con el que han logrado elevar el precio más de un 40 % desde que tocó fondo a finales de diciembre.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha pedido reiteradamente a la OPEP y sus socios que suavicen sus recortes, hasta ahora sin éxito.
Los expertos creen que el cártel liderado por Arabia Saudí no compensará los barriles que previsiblemente dejará de bombear Teherán hasta que las sanciones de Washington se hayan materializado y la reducción del bombeo iraní sea una realidad.
Esa perspectiva ha aumentado el nerviosismo en el mercado, ante el temor a que en las próximas semanas se estreche la diferencia entre la oferta y la demanda.
"La OPEP, y particularmente Arabia Saudí, serán cautelosos con un aumento de la producción", afirmó a Efe Christopher Haines, analista de la firma Energy Aspects.
"A finales de 2018, Arabia Saudí se anticipó a la postura dura sobre Irán que había anunciado Estados Unidos, pero se encontró con que Washington ofreció exenciones (a las sanciones) en el último minuto", comentó el experto.
La OPEP y sus aliados esperarán previsiblemente hasta su reunión ordinaria en Viena a finales de junio para analizar los efectos reales de las medidas estadounidenses y decidir sus próximos pasos, según Haines.
Gran parte de la producción iraní es un crudo pesado cuya demanda es particularmente elevada en las refinerías asiáticas, que en este momento terminan la temporada de mantenimiento de primavera y comienzan a ejecutar pedidos para satisfacer el aumento de la demanda en los meses de verano, a partir de junio.
En ese contexto, Trump ha avanzado que el próximo 2 de mayo terminará la prórroga que otorgó a ocho países para que pudieran continuar comprando petróleo a Teherán.
Japón, Corea del Sur, India, China, Taiwán, Turquía, Grecia e Italia se enfrentarán a sanciones a partir de entonces si continúan importando barriles iraníes.
Washington aspira a reducir "a cero" las ventas desde la república islámica, a fin de cercenar la principal fuente de ingresos del país, aunque Teherán insiste en que su bombeo nunca bajará del millón de barriles diarios.
Según el analista de Energy Aspects, es "improbable" que las sanciones estadounidenses logren detener por completo la producción petrolífera iraní.
En una nota dirigida a los inversores, el banco Goldman Sachs ha enfriado la posibilidad de que las medidas de EE.UU. disparen el crudo más allá de su nivel actual.
La entidad reconoce "los riesgos a corto plazo de un aumento de los precios", pero reitera su perspectiva de que el Brent se mantenga en un rango entre 70 y 75 dólares en el segundo trimestre.
Además del conflicto con Irán, las sanciones sobre Venezuela y la violencia en Libia son otros de los factores que pueden contribuir a impulsar los precios.
La demanda global, además, se ha mantenido en las últimas semanas más sólida de lo que muchos analistas habían pronosticado, lo que contribuye al sentimiento alcista en el mercado.
"La actividad de la economía china ha tocado fondo y está remontando. Los resultados del primer trimestre han sorprendido positivamente. Alemania también está dando un viraje económico, lo que debería contribuir a que se acelere el crecimiento de la demanda en Europa", sostuvo Haines.

Cinco países abandonan el dólar / Guillermo Herrera *

Cinco países, China, India, Turquía, Irán y Rusia, están abandonando el dólar parcialmente, poco a poco, como divisa de comercio internacional, y como herramienta financiera universal, debido a que la política de sanciones de Estados Unidos socavó la confianza en el dólar en el mercado mundial.

En las operaciones internacionales y en muchos mercados, el dólar sigue siendo la moneda líder, debido a que los precios del petróleo, el trigo, el cobre y otros bienes se establecen en moneda estadounidense. Además, los países con economías en desarrollo no pueden renunciar a los préstamos en dólares, ni a las reservas de divisas, porque a menudo tienen que pagar las importaciones con esta moneda, ya que las suyas no son aceptadas.

Pero los países pobres no quieren exponerse al riesgo constante asociado con las fluctuaciones de esta moneda. Además, la política de sanciones internacionales de Estados Unidos obliga a muchos a reconsiderar el sistema y a buscar otras soluciones.

NUEVAS SANCIONES
Por ejemplo, Washington prohíbe comerciar con Irán en dólares; por eso Teherán cambió al euro y realiza transacciones con Rusia, China y otros países en monedas nacionales. Pekín y Moscú también están desdolarizando el comercio bilateral.

Washington priva al dólar de su posición dominante en el mercado mundial porque lo usa como un arma financiera de destrucción masiva. Y lo hace no sólo en las guerras comerciales o monetarias, sino también para provocar hiperinflación, el retiro masivo de dinero de los bancos y la inestabilidad interna en aquellos países donde quiere cambiar el “statu quo” porque Washington puede derrocar a cualquier gobierno incluso sin pegar un tiro.

Si India, Italia, Grecia, Japón, Corea del Sur, Turquía, China y Taiwán continúan comprando petróleo a Irán, EE.UU. activará nuevas sanciones contra ellos. Los precios del petróleo subieron el lunes a su nivel más alto en casi seis meses, pero bajaron ayer miércoles, después que la Casa Blanca anunciara el fin de las exenciones que permitían a ocho países comprar crudo iraní a pesar de las sanciones de Washington contra Teherán. En Londres, el barril de Brent subió el lunes un 2,88 %, para llegar a más de 74 dólares.

CINCO CASOS
En el caso de China, la actual guerra comercial, que se desencadenó entre EE.UU. y China, y las sanciones, que fueron impuestas a los principales socios comerciales de Pekín, empujaron al país asiático a dar pasos para reducir su dependencia del dólar. Las autoridades chinas exigen a EE.UU. que abandone las sanciones petroleras contra Irán, ya que tales medidas desestabilizan el mercado mundial.

En el caso de India, la sexta economía más grande del mundo, a raíz de las sanciones que fueron impuestas a Moscú, Nueva Delhi decidió pagar en rublos por los sistemas de defensa aérea rusos S-400. El país también pasó a emplear la rupia para comprar el crudo iraní después de que Washington restableciera las sanciones que previamente habían sido impuestas a Teherán. También llegó a un acuerdo con los Emiratos Árabes Unidos para impulsar el comercio y las inversiones en sus propias monedas.

En el caso de Turquía, las relaciones entre Ankara y Washington se han deteriorado desde la fallida intentona golpista que tuvo lugar en 2016. La economía turca empezó a hundirse después de que Washington introdujera sanciones para responder al arresto del pastor estadounidense Andrew Brunson en Turquía.

Además la decisión de este miembro de la OTAN de comprar los sistemas rusos S-400 echaron más leña al fuego. En 2018 el presidente Erdogan anunció sus planes de acabar con el monopolio del dólar estadounidense en el comercio con sus socios.

En el caso de Irán, poco después de su victoria, el Presidente Trump retiró a EE.UU. del acuerdo nuclear que fue firmado con Irán en el 2015. Desde entonces el país persa volvió a ser el blanco de severas sanciones de Washington, que también amenazó con castigar a cualquier país que viole estas medidas.

Las sanciones obligaron a Teherán a buscar nuevas alternativas al dólar para cobrar sus exportaciones de petróleo. Por ello cerró un acuerdo con la India basado en rupias, y negoció la firma de un acuerdo de trueque y uso del dinar irakí.

Por su parte Rusia ya ha dado varios pasos para desdolarizar su economía debido al creciente peso de las sanciones que EE.UU. sigue introduciendo desde 2014. En particular, Rusia desarrolló un sistema nacional de pago, que es una alternativa al SWIFT, Visa y MasterCard, después de que EEUU amenazara con aplicar sanciones más duras que afectarían al sector financiero ruso.

EUROPA
También Bruselas quiere contrarrestar el monopolio del dólar, en el campo del comercio de materias primas y recursos energéticos. Los europeos quieren consolidar el euro como moneda mundial y pagar las importaciones solo con su divisa, con el fin de fortalecer la independencia económica de la eurozona.

Una parte de las transacciones para la compra del petróleo todavía se realiza en dólares. La Comisión Europea quiere cambiarlo, y responder de esta manera a las sanciones estadounidenses contra Irán. Nunca tuvo sentido que Europa pagara sus importaciones en dólares, lo que siempre fue una concesión a Estados Unidos. Ahora que el Presidente Trump, ha roto el acuerdo nuclear con Irán, la concesión ha perdido su vigencia.

LIBIA
Mientras tanto las fuerzas del mariscal Haftar anuncian en Libia la segunda fase de la batalla por Trípoli con el uso de fuerzas de Infantería, lo que contribuye a seguir desestabilizando al alza el precio del petróleo.

La Casa Blanca afirmó el pasado viernes que el presidente Trump, mantuvo una llamada telefónica con el mariscal Haftar en la que discutieron una visión compartida de la transición de Libia hacia un sistema político estable y democrático, lo que demuestra su apoyo a esta facción, junto con Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos.

Mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud hace un llamado al cese temporal de las hostilidades, afirmando que la crisis en el país africano se ha cobrado la vida de al menos 264 personas y ha dejado al menos 1.266 heridos desde que comenzó la ofensiva semanas atrás. Como siempre, los platos rotos los paga la población civil inocente.



 (*) Periodista español