jueves, 21 de abril de 2016

La AIE cree que el mercado petrolero volverá a equilibrarse en 2017

TOKIO.- El jefe de la Agencia Internacional de Energía (AIE), Fatih Birol, dijo el jueves que espera que el mercado del petróleo recupere su equilibrio el próximo año, siempre y cuando no haya grandes perturbaciones a la economía.

Birol dijo que los precios bajos del crudo han reducido la inversión petrolera en un 40 por ciento en los últimos dos años, con fuertes caídas en Estados Unidos, Canadá, América Latina y Rusia, e indicó que la dependencia mundial del petróleo de Oriente Medio se acelerará considerablemente en los próximos años.
"Este año esperamos el mayor descenso en el suministro de petróleo fuera de la OPEP en los últimos 25 años, casi 700.000 barriles por día. Al mismo tiempo, el crecimiento de la demanda mundial está en un ritmo agitado, encabezado por India, China y otros países emergentes", dijo a la prensa después de reunirse con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, en Tokio.
"Al finalizar el año en curso o a más tardar en el 2017, esperamos que los mercados petrolero y los precios se reequilibren. Cuando nos fijamos en todos los fundamentos -la demanda, la oferta y los inventarios- tengo todas las razones para creer que, en ausencia de una importante recesión económica, vamos a ver un equilibrio en los mercados para el 2017", declaró.
Birol dijo que las condiciones eran difíciles para los productores de petróleo de esquisto a pesar de una recuperación de los precios del crudo Brent de Londres por encima de 45 dólares el barril.
"Creo que 45 dólares es un poco de alivio para los productores de crudo en todo el mundo, pero esto aún es muy bajo para hacer rentable toda la producción de petróleo de esquisto de Estados Unidos", sostuvo.
También dijo que las exportaciones de crudo de Irán podrían aumentar en medio millón de barriles por día este año después del levantamiento de las sanciones occidentales contra el país.
"En general, creemos que Irán podría contribuir, si todas las condiciones son apropiadas, con alrededor de 500.000 barriles por día a los mercados", dijo.

El sector petrolero confía en un reequilibrio del mercado para finales de año

PARÍS.- El sector petrolero confía en un reequilibrio del mercado a partir de finales de año y advirtió hoy de la importancia de aumentar las inversiones y de apostar por tecnologías que reduzcan las emisiones para minimizar los desafíos que se presentan.

Menos de una semana después del fracaso de la reunión de Doha, en la que los principales productores de petróleo no lograron fijar un tope para su bombeo, representantes de las principales compañías y agencias de ese combustible instaron a no obcecarse con una visión "cortoplacista".
"Más allá de Doha, el mercado está cambiando. (...) No sé cuál será el precio, pero al menos será mejor de lo que estamos viendo actualmente", declaró en la XVII cumbre internacional del petróleo en París el secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Abdallah Salem El-Badri.
La reunión catarí buscaba congelar la producción y reducir la cantidad de crudo que llega a un mercado actualmente saturado para tratar de impulsar unos precios que se han devaluado cerca de un 75 % en el último año y medio.
El secretario general del Foro Internacional de la Energía (IEF), Aldo Flores Quiroga, resumió que, aunque "es muy difícil saber qué va a pasar con el movimiento de precios", "está claro que hay un proceso de rebalance del mercado", el cual "la gran mayoría de analistas esperan que ocurra para finales de año o principios del próximo".
Para el exministro argelino de Energía y presidente de Nalcosa, Nordine Ait-Laoussine, la estabilización requiere "un recorte inmediato" de la producción, y "las experiencias pasadas han demostrado que las fuerzas del mercado no pueden proveerlo en solitario".
Operadores, cadenas de suministro y gobierno conforman, según el presidente de la petrolera francesa Total, Patrick Pouyanné, el tridente que debe moverse "junto y de forma inteligente" para restaurar la rentabilidad.
La volatilidad por la que muchas compañías han reducido las inversiones podría derivar en un futuro en un escaso suministro, y ante la lentitud de la toma de decisiones, Pouyanné destacó que la mejor estrategia es "invertir cuando los precios están altos para empezar nuevas producciones cuando empiezan a bajar".
"Hay muchos desafíos a corto plazo, pero no debemos centrarnos demasiado en ese periodo, sino en el medio plazo", subrayó el directivo en uno de los paneles parisinos.
En ese futuro, con el horizonte puesto en 2040, la OPEP constató hoy que las energías fósiles "seguirán satisfaciendo la mayor parte de las necesidades energéticas del mundo", razón por la que animó a salirse de la imagen de que ese tipo de combustibles son "malos".
Defensores del medio ambiente acudieron hoy a la entrada del hotel en el que se celebró esta cumbre y penetraron en el interior del recinto para denunciar el impacto ecológico, con una protesta en la que recordaron los compromisos alcanzados en la cumbre del clima del pasado diciembre en París.
"Los desafíos medioambientales son un desafío que puede ser superado con soluciones que pueden encontrarse en tecnologías que reduzcan y en última instancia eliminen las emisiones", apuntó El-Badri.
A corto plazo, destacó la importancia de equilibrar el mercado, y a largo, afirmó que debe trazarse una ruta energética "práctica y realista" para seguir mejorando la eficiencia energética y el desarrollo de energías más limpias.
La Agencia Internacional de la Energía (AIE), representada por su director de energías sostenibles, Kamel Ben Naceur, avanzó que no hay garantías de que el ajuste será suave, pero advirtió de que si los precios siguen cayendo "durante décadas, hay una posibilidad de volver a la dependencia de Oriente Medio" experimentada en los años setenta.

Vicepresidente uruguayo viaja a Irán en visita oficial

MONTEVIDEO.- El vicepresidente de Uruguay, Raúl Sendic, viaja mañana a Irán en visita oficial al frente de una delegación de gobierno y el sector empresarial que tiene por propósito ampliar los lazos comerciales bilaterales, informaron fuentes del Ejecutivo. 

La estancia del vicemandatario en el país persa será de siete días y la agenda incluye reuniones con el presidente iraní, Hasán Rouhaní; su vicepresidente, Eshaq Yahanguirí; y el titular de la Asamblea Consultiva Islámica, Ali Lariyani, con quien intercambiará sobre la cooperación parlamentaria.

El programa de la delegación suramericana comprende, además, encuentros con el canciller Mohammad Javad Zarif y varios de los ministros del gabinete, entre ellos los de Industria, Comercio, Agricultura, además de cámaras empresariales.

Sendic estará acompañado por funcionarios de dependencias del Gobierno y organismos estatales, además de representantes del sector empresarial de la rama arrocera, cárnica y láctea.

Un comunicado destacó los estrechos lazos políticos entre Teherán y Montevideo en los últimos 35 años, y reconoció a ese país como uno de los principales destinos de las exportaciones uruguayas de arroz.

La República Islámica de Irán ocupaba el puesto 35 como destino de las exportaciones provenientes del país suramericano al cierre de 2015, lo cual representaba el 0,33 por ciento del total.

En otros productos como pescado congelado, excepto el filete, Uruguay se ubicó en el décimo lugar, mientras en las exportaciones a la nación persa de lana o pelo fino ordinario ocupó la primera posición con el 25,8 por ciento y en los medicamentos, el puesto 21.

El retorno del vicepresidente uruguayo a Montevideo está previsto para el jueves de la venidera semana.

El pacto sobre el clima, a punto de superar el siguiente paso

PARÍS.- Cuatro meses después de la euforia de la COP21, 160 países firmarán este viernes en la ONU el acuerdo de París sobre el clima, cuya aplicación implica que la economía mundial dé la espalda a las energías fósiles.

Esa ceremonia de firma "tiene ante todo una función simbólica muy fuerte", pero será también la "ocasión de consolidar la dinámica surgida del acuerdo de París" logrado el 12 de diciembre pasado por 195 países, estima Pascal Canfin, exministro francés y director de WWF France.
Unos 60 jefes de Estado estarán presentes en Nueva York, entre ellos el francés, François Hollande; así como el viceprimer ministro chino, Zhang Gaoli; el primer ministro canadiense, Justin Trudeau; y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry.
En total, 160 países estarán representados, según la ministra francesa del Medio Ambiente, Ségolène Royal.
La adopción del texto en París, que puso fin a años de complejas y laboriosas negociaciones, "no quiere decir que las partes se adhieren automáticamente al acuerdo", recuerda Eliza Northrop, del World Resources Institute. Son necesarias todavía dos etapas: la firma (abierta hasta abril de 2017) y la ratificación en función de las reglas nacionales (votación por el Parlamento, decreto, etc.)
Formalmente, para entrar en vigor, el acuerdo de París tiene que ser ratificado por 55 países que representen el 55% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.
"Una entrada en vigor rápida", quizá en 2017 o 2018, "permitiría enviar un mensaje político", señala Laurence Tubiana, la negociadora francesa. Y el tiempo apremia: "estamos lejos del objetivo de un alza limitada a 2°C" y, para que haya una posibilidad de respetar ese límite, "las acciones anteriores a 2020 son muy importantes", recalca Tubiana, recordando que el acuerdo de París dio un marco para "acelerar las transformaciones hacia una economía sobria en carbono".
"Para aplicarlo, los Estados deben ahora organizar su transición energética, que pasa por una reorientación de las inversiones", resume Celia Gautier, de la ONG Réseau Action Climat.
Buenas noticias para el clima: las energías renovables registraron en 2015 un crecimiento récord de +8%, los precios bajos del petróleo frenan las inversiones costosas de los grupos petroleros (Ártico, 'offshore') y el sector del carbón no va bien.
En Estados Unidos, con la competencia del gas natural, cede terreno. La semana pasada, el mayor productor estadounidense, Peabody, se declaró en cese de pagos y unas 250 centrales cerraron, según la ONG Sierra Club.
En China, el consumo bajó en 2014 y 2015, a raíz, ciertamente, de la desaceleración de la economía, pero también de la voluntad del Gobierno de luchar contra la contaminación del aire. Pekín anunció recientemente la suspensión de casi todos los proyectos de centrales a carbón.
No obstante, las necesidades en infraestructuras energéticas son enormes y está prevista la construcción de cientos de centrales a carbón (India, Turquía, Indonesia, etc.).
"Sabíamos que el acuerdo de París no sería una varita mágica que borraría todos los proyectos nefastos", reconoce Celia Gautier.
Tasa o mercado de carbono, fin de las subvenciones a las energías fósiles, normas de emisiones en la industria, desarrollo de transportes limpios, apoyo a las energía renovables y a la eficacia energética, lucha contra la deforestación, cambio de las prácticas agrícolas: los países tienen un gran abanico de sectores en los que actuar para respetar sus compromisos sobre las emisiones.
El respeto por parte de los países ricos de las promesas de ayuda a los países en vías de desarrollo condicionará también inversiones más 'verdes'.
Por su parte, el sector financiero tendría que desempeñar un papel clave.
Hay ahora "una percepción creciente de los riesgos ligados a las inversiones a largo plazo en las actividades" energéticas, afirma Alden Meyer, de la ONG Union of Concerned Scientists. El último ejemplo en la materia es la revuelta de los accionistas de Exxonmobil para lograr una estimación de las consecuencias de las políticas en favor del clima sobre las actividades del grupo.

El petróleo baja por toma de beneficios

NUEVA YORK.- El petróleo cerró el jueves en baja en Nueva York, debido a tomas de beneficios luego de dos sesiones en alza.

El barril de "light sweet crude" (WTI), en su primer día de comercialización para junio, perdió un dólar a 43,18 dólares.
En el mercado de Londres, el barril de Brent para junio bajó 1,27 dólares a 44,53.
"La gente recupera el dinero y espera ver qué pasará", dijo Carl Larry, de la firma Frost & Sullivan para quien, no obstante, "el humor se ha vuelto positivo" en el mercado.
"No hubo noticia alguna que orientara los precios alza pero la tendencia es positiva. Algunos contemplan un crecimiento de los precios hasta 50 dólares; lo cual no es imposible dado el crecimiento de las importaciones petroleras estadounidenses y la baja de su producción propia", añadió.
Estados Unidos informó el miércoles que por segunda semana consecutiva su producción petrolera bajó y quedó en sus menores niveles en 18 meses.
"La menor producción estadounidenses asegura que la sobreoferta mundial disminuirá notablemente en el segundo semestre y el mercado petrolero podría estar más equilibrado de aquí al año próximo, como muy tarde", dijeron expertos del Commerzbank.

Obama en Arabia Saudita; complicado equilibrismo geoestratégico / Ulises Canales

El viaje del presidente estadounidense, Barack Obama, a Arabia Saudita tiene hoy el doble propósito de respaldar al "eje árabe anti-iraní" y, al mismo tiempo, defender su estrategia favorable de un balance más amplio de poderes en Medio Oriente. Obama se reunirá por segunda vez con los líderes de las seis naciones árabes del golfo Pérsico después de la cumbre de mayo de 2015 en Camp David, con el elemento añadido y positivo de ser huésped del rey Salman bin Abdulaziz, quien declinó asistir a la cita de hace casi un año.

A excepción de los emires de Qatar y Kuwait, Salman y los gobernantes de Emiratos Árabes Unidos (EAU), Bahrein y Omán no asistieron a Camp David justo cuando el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) se sintió abandonado por Washington que entonces apostó todo para sellar el acuerdo nuclear con Irán.

El mandatario norteamericano busca cimentar la afinidad con sus principales aliados árabes, aunque la reunión de ayer en Washington entre su secretario de Estado, John Kerry, y el canciller iraní, Mohammad Javad Zarif, corroboró que desea diversificar nexos estratégicos con los grandes actores de la región, y entre esos tiene indiscutible espacio la república islámica.

Con el anuncio del Congreso de su país de que se suspende temporalmente el trámite de un proyecto de ley que permitiría a las víctimas de los atentados del 11 de septiembre de 2001 demandar al Gobierno de Arabia Saudita y a los de otros países, el recibimiento del presidente sin dudas fue más cálido.

El inquilino de la Casa Blanca se inclina por reasegurar los lazos estratégicos con las naciones del CCG para evitar que su administración sea señalada como la que dañó los lazos con aliados tradicionales por el simple hecho de rebajar tensiones Irán, algo visto como delicado equilibrismo.

De hecho, el presidente llegó al reino wahabita sin conseguir disipar recelos y críticas de ese país y de sus socios de la región sobre el acuerdo nuclear que seis potencias mundiales firmaron con Teherán en 2015.

Además, para el CCG resultó decepcionante que el gobierno estadounidense apoyara el levantamiento en enero de sanaciones económicas internacionales a Irán, como parte del referido pacto de Viena, en tanto eso lo ven como un espaldarazo al fortalecimiento del mayor rival en la región.

Como compensación, el secretario norteamericano de Defensa, Ashton Carter, quien acompaña a Obama, adelantó que buscarán ayudar con operaciones militares y navales a los estados del área para contrarrestar lo que describió como actividades desestabilizadoras de Teherán.

Comentaristas regionales sostienen que la que algunos ya llaman la visita de despedida del mandatario, pues culmina su administración dentro de nueve meses, lo priva de tiempo suficiente para enmendar los nexos con sus más estrechos aliados en Medio Oriente, después de Israel.

Al entender que pasar página a la hostilidad con Teherán es ventajoso a la postre para los intereses de Estados Unidos y de Medio Oriente, observadores creen que en la cumbre de Riad Obama hará cuanto pueda por enmendar entuertos, aunque sin disculparse o retractarse de políticas previas.

En ese sentido, respaldará relaciones estratégicas con Egipto, aunque con reservas en materia de derechos humanos, y dará un nuevo espaldarazo al estancado proceso de paz palestino-israelí, dos asuntos predominantes en la agenda del rey Salman durante su reciente visita a El Cairo.

Respecto a asuntos de mayor incidencia para el Golfo, si bien procurará persuadir a sus anfitriones para que acepten o entiendan la singularidad de la relación con Irán, suscribirá las medidas adoptadas en los últimos dos meses contra ese país y su aliado libanés, el movimiento Hizbulah.

Analistas creen que en este sentido podría apoyarse en la visión divergente que el gobierno de Abdel Fattah El-Sisi mantiene con el CCG respecto al país persa, el conflicto en Siria o la crisis política y de seguridad en Libia.

Por otro lado, Obama y los líderes árabes ratificarán sus coincidencias en asuntos como Hizbulah (Partido de Dios), contra el cual ambos emprenden un sinfín de medidas coercitivas y sanciones financieras tras considerarle una organización terrorista. Los del Golfo hace apenas dos meses.

El bloque de monarquías árabes encara en la actualidad tensiones diplomáticas con El Líbano con el argumento de que el Partido de Dios impone su voluntad en las decisiones de gobierno y mantiene bloqueada la actividad del parlamento para elegir al presidente del país.

Además de intentar aislar a la agrupación líder de la Resistencia chiita mediante resoluciones condenatorias de sus supuestas actividades terroristas en la Liga Árabe y la Organización de Cooperación Islámica, trata de bloquear sus medios de difusión, empeño en el que contó con respaldo de Egipto.

El proveedor satelital Nilesat canceló hace semanas la trasmisión del canal Al-Manar TV, de Hizbulah, luego de que lo hiciera su homólogo saudita Arabsat, que también vetó las operaciones del canal panárabe Al-Mayadeen por discrepar de su cobertura crítica a la actuación saudita en Siria y Yemen.

Como coincidencias capaces de distender los nexos, destacan los entendimientos en la lucha contra el DAESH, acrónimo árabe de EI, y otros grupos extremistas como el Frente Al-Nusra, así como emprender esfuerzos concertados para acabar las guerras en Siria y Yemen.

Nadie olvidad que el tema iraní y la reticencia de Washington a implicarse directamente en la crisis siria y otras regionales, se situaron como razones principales de las marcadas ausencias árabes en la cumbre de Camp David.