WASHINGTON.- El presidente de EE.UU., Donald
Trump, recibió hoy en la Casa Blanca a su homólogo suizo, Ueli Maurer,
con el que tenía previsto hablar acerca del papel de mediador
diplomático de Suiza en países como Irán y Venezuela.
La reunión entre Trump y Maurer fue cerrada a la prensa, pero al
recibirlo en la puerta del Ala Oeste de la mansión presidencial, el
mandatario estadounidense respondió a la pregunta de un periodista sobre
si creía que Estados Unidos entrará en guerra con Irán: "Espero que
no".
La Casa Blanca anunció la visita de Maurer apenas horas
antes de que se produjese, y la cadena de televisión CNN aseguró que esa
invitación de última hora tuvo que ver con el deseo de Trump de
conversar directamente con los iraníes para resolver el aumento de la
tensión bilateral.
Dado que Estados Unidos no tiene
relaciones diplomáticas con Irán y Suiza ejerce como poder protector de
los intereses estadounidenses en Teherán, Trump quiere que el país
helvético le ayude a establecer un canal para comunicarse con los
iraníes, de acuerdo con CNN, que citó a una fuente familiarizada con los
planes de la Casa Blanca.
La cadena de televisión
estadounidense informó hace una semana de que la Casa Blanca había
contactado con Suiza para proporcionarles un número de teléfono en el
que supuestamente los iraníes podían localizar a Trump.
Este jueves la Casa Blanca se limitó a señalar que Trump y Maurer
hablaron de "mejorar las relaciones económicas, el desarrollo de la mano
de obra, y una serie de asuntos internacionales, incluidas las crisis
en Oriente Medio y en Venezuela".
"El presidente
Trump expresó su gratitud por el papel de Suiza para facilitar la
mediación internacional y las relaciones diplomáticas en nombre de
Estados Unidos", apuntó en un comunicado la mansión presidencial, sin
ofrecer más detalles.
La cita entre Trump y Maurer se
produjo, además, un día después de que el Gobierno del presidente
venezolano, Nicolás Maduro, propusiera a EE.UU. nombrar a un tercer país
para que proteja su embajada en Washington, donde no quedan
diplomáticos venezolanos después que ambos países rompieran relaciones.
Las autoridades de EE.UU. terminaron precisamente hoy con una protesta
de activistas a favor de Maduro en el interior de la embajada en
Washington que había empezado el pasado 10 de abril, y dejaron vía libre
para que los enviados del líder opositor Juan Guaidó ingresen en la
legación.
Estados Unidos firmó en abril un acuerdo
con Suiza para que proteja su embajada en Caracas, dado que Maduro
rompió relaciones con Washington, pero al menos hasta la semana pasada,
ese pacto no había llegado a aplicarse porque Venezuela no lo había
aceptado.
Venezuela afronta una crisis política y
social que se acentuó después de que el 23 de enero el líder del
Parlamento, Juan Guaidó, se declarara mandatario interino al invocar
unos artículos de la Constitución venezolana.
La
oposición venezolana, que no reconoce el nuevo mandato de seis años que
juró Nicolás Maduro el pasado 10 de enero, al considerar ilegítimas las
elecciones de mayo del año pasado, asegura que el país atraviesa una
"emergencia humanitaria compleja" y ha pedido ayuda a la comunidad
internacional para atenderla.