MADRID.- El precio del petróleo vive en 2016 su peor ejercicio desde
2004, con un precio medio en torno a los 43 dólares en lo que va de año y
sin indicios que apunten a una recuperación. A ello contribuye
la difícil combinación que arroja una demanda más débil de lo esperado
con un exceso de oferta, una foto que se va a mantener, como mínimo, en
lo que queda de año, según expertos españoles consultados.
Tras arrancar el año en mínimos no vistos en 12 años, el barril de Brent se mantiene en torno de los 40 dólares,
muy lejos de los picos alcanzados en años como 2008 o 2012, que terminó
con un promedio de 111 dólares, según datos de Bloomberg.
Tras un 2013 y un 2014 de precios en los 100 dólares, 2015 ya supuso
un cambio radical terminando en 53 dólares de media. “Se esperaba que
para este último trimestre del año se balanceara algo el mercado, cierta
remontada de precios que, por ahora, parece complicada por varios
factores”, resume el director del programa de Energía del Real
Instituto Elcano, Gonzalo Escribano.
Por un lado, una demanda ralentizada y, por otro, un exceso
de oferta con los países de la OPEP con producción al máximo y
resistiendo más de lo esperado. “Lo podríamos definir como el
dilema del prisionero”, señala el catedrático de la Universidad de
Barcelona Mariano Marzo. “En la OPEP hay interés por subir precios,
pero se miran unos a otros a ver quién es el primero en dar un paso (…)
necesitan que suban pero sin resucitar al ‘fracking’”, explica Marzo,
que apunta a mediados de 2017 para poder ver una recuperación de los
precios.
Esta misma semana la Agencia Internacional de la Energía (AIE) ponía
cifras a ese panorama: una reducción de sus previsiones sobre el consumo
mundial de petróleo tanto este año como el próximo y un pronóstico de
que el desequilibrio del mercado va para largo. “El informe de la AIE ha
sido un jarro de agua fría. Nos vamos a mediados de 2017 para llegar a
ese cierto equilibrio”, coincide Escribano.
“Se barajaba que los precios a final de año estuvieran en 60 dólares pero parece complicado
(…) se van a quedar más o menos como ahora, alrededor de los 45 dólares,
no se va a dar repunte ni tampoco hundirse”, concluye el experto del
Real Instituto Elcano.
¿Dónde podría estar ese equilibrio?
Para Marzo, un barril de Brent por encima de los 60 dólares pondría
de nuevo en el mercado a los no convencionales, a la industria del
“fracking”, lo que no interesa a la OPEP, por lo que el equilibrio
podría no llegar ni a ese nivel.
“La industria petrolera norteamericana está viviendo su mayor crisis
desde la gran depresión, necesitan vender en cuanto el petróleo repunte y
reducir deuda”, explica Marzo, que apunta a otro factor lejos de los
pozos y las refinerías que está marcando también la extrema volatilidad
del crudo en los últimos años.
En los mercados de futuros, expone, se mueven diez veces más de barriles al día de los que se consumen.
“Lo mejor para todos, consumidores e industria, es salir de esa
volatilidad extrema, frenar ese mercado paralelo que distorsiona el
sector”, concluye.
El barril de crudo Brent para entrega en noviembre ha abierto este viernes en
el mercado de futuros de Londres en 46,22 dólares, con una caída del
0,49 % frente al cierre de la jornada anterior.