MOSCÚ.- La procuraduría de Rusia asumió hoy el control de la investigación
del accidente de un Boeing 737-800 de la compañía de Emiratos Arabes Fly
Dubai con 62 personas a bordo, en el aeropuerto de Rostov del Don,
distrito sur.
Los 55 pasajeros y siete tripulantes murieron cuando los pilotos
intentaban el aterrizaje en la terminal de Rostov, confirmaron fuentes
del ministerio regional de Situaciones de Emergencia.
De momento los investigadores rusos manejan como versiones de la catástrofe las inclemencias del tiempo, un error humano y fallo técnico.
La Procuraduría inició este sábado la inspección de las técnicas de seguridad de vuelo en el aeropuerto de Rostov.
El siniestro ocurrió en la madrugada cuando el Boeing 737 intentaba el aterrizaje durante más de dos horas, tras efectuar el segundo giro.
Fuentes de los servicios de emergencias, citadas por las principales agencias rusas, dijeron que la nave sobrevoló el aeropuerto unos 40-50 minutos hasta que el comandante decidió aterrizar.
El avión se fragmentó en pedazos al impactar en tierra, en la pista.
Según el gobernador de Rostov, Vasili Golubiov, durante la noche el territorio experimentó fuertes vientos hasta la escala de huracán, con ráfagas de 70 kilómetros por hora, lo cual pudo influir en el aterrizaje.
Entre los pasajeros estaban registrados 44 ciudadanos de Rusia, ocho de Ucrania, dos de India y uno de Uzbekistán, la mayoría turistas.
Se informó que fue hallada una de las cajas negras de la nave, mientras proseguía la búsqueda de los registros de vuelo.
De momento los investigadores rusos manejan como versiones de la catástrofe las inclemencias del tiempo, un error humano y fallo técnico.
La Procuraduría inició este sábado la inspección de las técnicas de seguridad de vuelo en el aeropuerto de Rostov.
El siniestro ocurrió en la madrugada cuando el Boeing 737 intentaba el aterrizaje durante más de dos horas, tras efectuar el segundo giro.
Fuentes de los servicios de emergencias, citadas por las principales agencias rusas, dijeron que la nave sobrevoló el aeropuerto unos 40-50 minutos hasta que el comandante decidió aterrizar.
El avión se fragmentó en pedazos al impactar en tierra, en la pista.
Según el gobernador de Rostov, Vasili Golubiov, durante la noche el territorio experimentó fuertes vientos hasta la escala de huracán, con ráfagas de 70 kilómetros por hora, lo cual pudo influir en el aterrizaje.
Entre los pasajeros estaban registrados 44 ciudadanos de Rusia, ocho de Ucrania, dos de India y uno de Uzbekistán, la mayoría turistas.
Se informó que fue hallada una de las cajas negras de la nave, mientras proseguía la búsqueda de los registros de vuelo.
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