LONDRES.- El
mercado del crudo tuvo su peor trimestre en cuatro años, pero uno no lo
hubiera detectado si observara únicamente las cifras de las excelentes
ganancias de Big Oil. Las
cinco compañías de petróleo cotizadas en bolsa más grandes del mundo
superaron las expectativas de los analistas, en algunos casos
anulándolos. El resultado da credibilidad a lo que han estado diciendo:
que han sido disciplinados, centrándose en los barriles de costo más
bajo, los cuales pueden generar ganancias incluso durante la increíble
volatilidad del mercado.
"La
gente se está dando cuenta de que estas compañías pueden operar con un
precio bajo del petróleo" dijo Christyan Malek, analista de JPMorgan
Chase & Co., por teléfono. "Seguimos siendo optimistas con el
grupo".
A continuación los cinco puntos más importantes de la temporada de ganancias de 2018:
1. El dinero es rey
Si
Big Oil ha aprendido a sobresalir en algo, es en la generación de
montones de efectivo. Todo el sector se hinchó en los años previos a
2014, ya que los precios del crudo cada vez más altos hacían que hasta
enormes proyectos ultra costosos y sobre diseñados parecieran
lucrativos.
Los
inversores castigaron esta visión de corto alcance y han presionado
continuamente a las compañías para que operen con austeridad. Como
resultado, los grandes del petróleo se centraron en los barriles que
requieren menores gastos operativos y de capital. Tan solo en BP Plc, la
compañía dijo que reduciría los costos de upstream en 45 por ciento.
Como resultado, dieron con el trimestre de mayor generación de efectivo
para las cinco petroleras más grandes desde 2011, lo que se utilizará
para recomprar acciones, recortar la deuda e iniciar más proyectos de
alta calidad.
2. Menos enfoque en las reservas
En
los viejos tiempos, la única cifra que realmente importaba para las
compañías de petróleo era la cantidad de reservas, y podría ser el fin
de la carrera de un director ejecutivo permitir que los campos de
petróleo se agoten sin reemplazarlos con la misma cantidad, o
preferiblemente más, de barriles nuevos.
La
perspectiva actual es más variada. Si bien los inversionistas
recompensaron a Exxon Mobil Corp. por reemplazar todas sus reservas en
el cuarto trimestre y al mismo tiempo haber reducido la caída de la
producción, impulsaron las acciones de Royal Dutch Shell Plc cuando la
compañía dijo que solo había reemplazado aproximadamente la mitad de sus
reservas.
La directora financiera Jessica Uhl dijo en una entrevista en
Bloomberg Television que no estaba preocupada por la cifra en absoluto:
"Estamos enfocados en aumentar el valor y aumentar nuestro flujo de
efectivo".
En
el cuarto trimestre, esta actitud cobró vida. La producción cayó y los
inversores se encogieron de hombros, ya que el sector dejó en claro que
puede hacer más con menos.
3. El downstream tiene lo suyo
El
downstream fue la salvación del sector cuando los precios del crudo se
derrumbaron entre 2014 y 2017. Las refinerías obtuvieron el petróleo a
bajo precio, lo que tornó menos costoso convertirlo en productos como
gasolina o diésel.
Las
compañías no dependían tanto de esa división en 2018, ya que los
precios del petróleo aumentaron durante la mayor parte del año, pero se
mantuvieron fuertes durante el último trimestre, lo que ayudó a las
cinco compañías de petróleo más grandes a superar las estimaciones de
los analistas.
Chevron Corp. es la única empresa que produjo menos en el
segmento downstream que a principios de 2014, cuando el petróleo
cotizaba a más de US$100 por barril. La disminución fue a causa de las
desinversiones en Canadá y Sudáfrica, así como por gastos asociados con
mantenimiento en EE.UU., dijo el director ejecutivo Pat Yarrington.
4. La deuda comienza a aliviarse
Comprar
a precio bajo y vender a precio alto siempre es una buena idea, y
algunas compañías como Total SA, se apilan sobre la deuda para recuperar
activos durante la recesión. A medida que aumenta el flujo de efectivo
libre gracias a la "disciplina de capital" de las empresas, se están
desaprovechando activamente. El movimiento les puede dar un poco de
pólvora adicional para comprar más producción en el futuro.
La
excepción notable es BP. La deuda neta de la petrolera británica está
en su nivel más alto en al menos una década; una combinación de una
compra de 10.500 millones de activos de shale de EE.UU. y la carga
financiera continua de pagos por la mortal catástrofe de Deepwater
Horizon en 2010.
5. Se incremente el promedio de retorno
Poco
enfurece más a los inversores que el desperdicio de capital. Y las
empresas reconocieron que fueron demasiado lejos con gastos en proyectos
que en finalmente no fueron tan rentables en los últimos años.
Ahora
están enfocados en aumentar nuevamente su rendimiento promedio sobre el
capital empleado. Las grandes europeas, Shell, BP y Total rompieron
cifras anuales para mostrar cómo están mejorando los rendimientos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario