sábado, 14 de junio de 2014

España duplicó sus exportaciones de Defensa en 2013 por sus ventas a Arabia y los Emiratos

MADRID.-   Las ventas de armas a países del Golfo Pérsico por parte de España han sido cuestionados por varios grupos parlamentarios de la oposición, como ERC e Izquierda Plural, dada su dudosa condición democrática. 

García Legaz ha recordado que, en las últimas décadas, esos países han sufrido ataques a su integridad territorial (como la invasión de Kuwait) y es "lógico" que cuenten con necesidades de Defensa. "Y que cuenten con la industria española en lugar de la francesa o la británica, pone de relevancia las capacidades de nuestra industria", ha añadido.
   También, y ante las preguntas de Joan Tardà, de ERC, el secretario de Estado ha querido dejar claro que, aun cuando Juan Carlos I haya cumplido magníficamente como Jefe del Estado para propiciar el clima adecuado para las exportaciones españolas, los contratos no los firma él, sino las empresas con el Gobierno de Arabia Saudí
   Por otro lado, y además de la suspensión definitiva de licencias de venta de armamento a Egipto por las revueltas del país, el secretario de Estado ha informado de que el Gobierno denegó en 2013 dos acuerdos previos de exportación a Taiwan, uno de vehículos aéreos no tripulados y otro de espoletas de granada, ante el riesgo de agravamiento de la tensión regional.
   En cuanto al material policial y de seguridad, en 2013 alcanzaron 4,7 millones de euros, especialmente con destino a Túnez --el 42,6% (2 millones)--, Perú --31% y 1,4 millones-- y Venezuela --16,8% y 800.000 euros--. Las exportaciones supusieron sólo un 14% de lo autorizado, que era de 33,3 millones.
   Respecto a las operaciones de armas de caza y deportivas (principalmente cartuchos), las exportaciones alcanzaron los 50,9 millones de euros, sobre todo con destino a Estados Unidos, con 19,6 millones que representaron el 38,5%.
España duplicó en 2013 sus ventas de material de Defensa con respecto al año anterior, alcanzando unas exportaciones de 3.907,9 millones de euros, gracias principalmente a una serie de operaciones con Emiratos Árabes Unidos (EAU), Australia y Arabia Saudí, principalmente.
   Así lo ha dado a conocer en el Congreso el secretario de Estado de Comercio, Jaime García Legaz, quien achaca este "sustancial aumento" por la diferencia en el número de aviones militares transportados, 33 en 2013 frente a 12 el año anterior. De hecho, la venta de aeronaves supuso el 70,5% del total (2.756,7 millones), frente al 16,4% (642,8 millones) que representaron los buques de guerra.
   También subieron las ventas a países de la Unión Europea, de 746 millones a 1.414 millones, pero ya sólo suponen el 36,2% del total, cuando en 2004 representaban el 79% y en 2005 estaban en el 59,8%. Reino Unido (incluyendo dos aviones de reabastecimiento), Francia (seis aviones de transporte), Alemania, Italia, Grecia y Polonia (dos aviones de transporte) fueron los principales destinatarios.
   Los países de la OTAN absorbieron un 38,3% por ciento de las exportaciones con 1.497,4 millones de euros, y el resto, un total de 21 Estados, coparon el 61,3% de las operaciones, por un  importe de 2.396 millones.
   Entre ellos destacan los contratos de venta de material de defensa a EAU, Australia y Arabia Saudí que sumaron 1.732 millones, lo que supone el 44,4% de las exportaciones totales. En concreto, los Emiratos adquirieron material por 717 millones, incluyendo tres aviones de reabastecimiento en vuelo y bombas de aviación; Australia compró por 609,1 millones (un buque de guerra y bloques para otro), y Arabia Saudí otros 406,4 millones (dos aviones de reabastecimiento y munición de artillería).
   En cuanto a la exportación de productos y tecnologías de doble uso, se produjo una caída del 35,2% con relación a 2012, año en que se vendieron dos generadores de vapor por valor de 81,7 millones. Sin otra operación de ese calado, en 2013 sólo se llegó a 151,6 millones.    
   China copó la quinta parte de esas exportaciones, con un volumen de 30,6 millones, pero destaca especialmente el hecho de que Irán, sometido a sendos embargos de Naciones Unidas y la UE, haya sido el segundo destino, con contratos que sumaron  21,5 millones (el 14,2% del total) y que consistieron, básicamente, en tubos de acero inoxidable para el sector siderúrgico y válvulas con repuestos para las industrias de generación de energía, petroquímica, del petróleo y del gas.