ESTAMBUL.- La
industria mundial del gas y del petróleo se reúne desde hoy domingo y hasta el
jueves en Estambul para celebrar el 22º Congreso mundial del petróleo,
mientras el precio del oro negro no logra recuperarse a pesar de la
intervención de la OPEP.
Hace
tres años, la precedente edición se celebró en un mundo donde el precio
del petróleo superaba los 100 dólares por barril, antes de que se
produjera una brutal caída de las cotizaciones, debido a una abundante
oferta, alimentada por el 'boom' de los hidrocarburos de esquisto en
Estados Unidos.
El
ambiente ha cambiado ahora, con precios del crudo que se mantienen
desde hace tiempo en torno a los 50 dólares el barril, considerados muy
bajos por las compañías petroleras y los países productores, muy
dependientes económicamente de sus hidrocarburos.
Se
constata una "decepción" por el efecto limitado que tuvo en el mercado
el acuerdo firmado a fines de 2016 entre la Organización de Países
Exportadores de Petróleo (OPEP) y los demás países productores, como
Rusia, constata Sarah Emerson, presidenta del gabinete Energy Security
Analysis, con sede en Estados Unidos.
Este
acuerdo para reducir la oferta de petróleo fue renovado en mayo y se
mantiene vigente hasta marzo de 2018. Pero según la Agencia
Internacional de Energía (AIE) hasta entonces Estados Unidos va a seguir
produciendo grandes cantidades, con lo que el crecimiento de la oferta
será mayor que el del consumo.
Una
reunión entre ministros de los países implicados en el acuerdo está
prevista a fines de este mes, pero según la agencia Bloomberg, que cita a
responsables rusos, Moscú se opondrá a prolongarlo o a reforzar las
cuotas de producción actualmente vigentes.
A ello se añade una producción en alza en Libia y Nigeria, lo que añade cientos de miles de barriles más en el mercado.
Prueba
del pesimismo reinante es que varios bancos, como JP Morgan, Société
Générale o Goldman Sachs, han revisado a la baja en los últimos días sus
previsiones sobre los precios del crudo.
"La
industria (petrolera) ha ingresado en el 'low cost' (...) Se repite lo
que hemos visto hace cinco, seis años", con la competencia entre el gas
de esquisto y el gas ruso, opina Thierry Bros, investigador del Oxford
Institute for Energy studies.
Tras
una ceremonia de acogida el domingo, en la que se entregará un premio
al secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, expresidente de
la petrolera ExxonMobil, el Congreso albergará durante cuatro días a lo
más granado del mundo en el sector de hidrocarburos, como el presidente
de la compañía saudí Aramco, Amin H. Nasser, o los de gigantes como
Total (Patrick Pouyanné), Shell (Bee van Beurden) o BP (Bob Dudlay).
Los
temas que se tratarán serán el impacto para el sector del acuerdo
internacional sobre el clima, los esfuerzos de competitividad en un
contexto de precios bajos, y las relaciones entre los países de la OPEP y
los productores que no integran el cártel.
Pero
la crisis entre Qatar y sus vecinos del Golfo, que lo acusan de apoyar
al "terrorismo" y lo han aislado económicamente, será otro de los
asuntos a abordar. Sobre todo porque Qatar, primer productor mundial de
gas líquido, anunció que quiere aumentar en 30% su producción.