domingo, 4 de enero de 2015

EE UU aspira a suceder ya a Arabia Saudí como líder energético mundial

BOSTON.- El exsecretario del Tesoro Lawrence Summers dijo que el próximo impulso económico de Estados Unidos podría ser exportar sus combustibles fósiles a todo el mundo, una medida que podría convertir al país en la próxima Arabia Saudí, mientras la Fed retira su estímulo económico.

"Estados Unidos tiene la oportunidad de ser la economía energética de la próxima década, lo que Arabia Saudí ha sido durante las últimas dos a tres décadas", dijo  Summers.
"El efecto de permitir las exportaciones de petróleo (...) reduciría en lugar de aumentar los precios de los combustibles en Estados Unidos", agregó.
Summers, conocido por sus opiniones abiertas sobre lo que describe como una decepcionante recuperación económica de Estados Unidos, hizo sus comentarios en la conferencia anual de la American Economics Association.
En tanto, en la misma conferencia, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Boston, Eric Rosengren, dijo que la baja inflación en todo el mundo y las pequeñas presiones por los aumentos de sueldos y precios en Estados Unidos deberían obligar a la Reserva Federal a actuar más lentamente al retirar su política monetaria expansiva.
Rosengren reiteró su llamamiento a que el banco central de Estados Unidos se tome su tiempo para establecer una política más normal después de años de estímulo para impulsar la economía.
"Creo que la inflación subyacente baja y las cifras de crecimiento de los sueldos brindan una amplia justificación para la paciencia", dijo Rosengren.
"Un enfoque paciente de política es prudente hasta que podamos esperar de manera más segura que la inflación regresará a la meta del 2 por ciento de la Fed durante los próximos años", agregó.
Summers, profesor de economía en Harvard, reiteró que está insatisfecho con el avance de la economía del país.
"Estados Unidos está ahora un 10 por ciento por debajo de su potencial, según fue estimado en el 2007", dijo Summers.
"La disminución en la brecha de la producción no se debe a que nos hayamos acercado a lo que creímos que era nuestro potencial. Se debe a que revisamos a la baja nuestra evaluación del potencial de la economía. Ese 10 por ciento potencial representa unos 20.000 dólares por cada familia estadounidense", agregó.
Los comentarios de Rosengren y Summers se dan mientras la presidenta de la Fed, Janet Yellen, establece las bases para la primera alza de tipos interés del banco central en casi una década.
La Fed cambió su guía sobre los tipos de interés el mes pasado en su reunión de política, agregando un texto en su comunicado sobre que el banco central se aproxima a un aumento de los tipos.
Si bien muchos esperan que la Fed comience a subir los tipos en algún momento a mediados de este año, funcionarios como Rosengren han abogado por un proceso lento y estable.
Ese enfoque se opone al de otros funcionarios de la Fed que sostienen que el banco central ha esperado demasiado tiempo con los tipos cerca de cero, nivel en el que han permanecido desde diciembre del 2008.
Summers está a favor de que Estados Unidos gaste cerca de un 1 por ciento del PIB en mejoras de la infraestructura pública. Dijo que la actual inversión pública neta en infraestructura es menor al 1 por ciento del PIB.
"Es menos que la mitad de lo que promedió en el período posterior a la Segunda Guerra Mundial", dijo Summers.
Rosengren dijo en sus comentarios que la última vez que el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) subió sus tipos después de una recesión fue en junio del 2004, cuando la tasa de desempleo era de un 5,6 por ciento, por debajo del actual 5,8 por ciento y la inflación era de un 2,8 por ciento, muy por sobre su actual nivel de un 1,2 por ciento.
"Algunos temen que la paciencia signifique postergar la primera alza de tipos hasta mucho después de la llegada de condiciones económicas que históricamente han resultado en un ajuste", dijo Rosengren.
"Pero yo apuntaría a que aún tenemos camino por recorrer antes de llegar a esas condiciones, así que no hemos sido muy pacientes aún", agregó.

El presidente egipcio Abdel Fattah El Sisi viaja a Kuwait en busca de inversiones

EL CAIRO.- El presidente egipcio, Abdel Fattah El Sisi, viajará mañana a Kuwait por invitación del emir Sabah Al Ahmed Al Jaber Al Sabah, con quien sostendrá conversaciones, reportaron hoy fuentes locales. 

Uno de los puntos de la agenda del mandatario egipcio será una reunión con miembros de la Cámara de Comercio e Industria kuwaití para promover las relaciones comerciales y las inversiones.

Este el segundo viaje al exterior de El Sisi en las dos últimas semanas a contar desde la visita que realizara a fines del mes pasado a China, donde suscribió una alianza estratégica de la que espera fondos para un plan de desarrollo en embrión en la gobernación septentrional de Suez.

El visitante planea reunirse, además, con el presidente del parlamento, Marzuk Ali al Ghanim; el primer ministro, Jaber Al-Mubarak Al-Hamad Al-Sabah; "y otros altos funcionarios del Gobierno", añade el reporte, según el cual el canciller egipcio, Sameh Chukri, formará parte de la delegación.

Kuwait, junto a Arabia Saudí y Emiratos Arabes Unidos comprometieron una ayuda de 15.000 millones de dólares en fondos, petróleo y derivados para apuntalar la economía egipcia después que El Sisi derrocó en julio de 2013 al presidente islamista Mohamed Morsi.

De acuerdo con reportes oficiales, de esa cifra El Cairo ha recibido alrededor de 12.000 millones.

Kuwait es uno de los miembros más influyentes del Consejo de Cooperación del Golfo y se estima que interpuso sus buenos oficicios junto al Reino de Arabia Saudí para distender los nexos egipcio-qataríes, en punto de fricción tras la deposición de Morsi.

La semana pasada Qatar anunció la clausura de la emisora Mubachar Misr, la televisora satelital Al Jazeera, dedicada a difundir noticias sobre Egipto desde un ángulo desfavorable a las actuales autoridades.

Irak bate su récord de exportación de petróleo desde 1980

BAGDAD.- Las exportaciones de petróleo de Irak alcanzaron en diciembre su máximo en varias décadas, anunció el portavoz del Ministerio del Petróleo iraquí, Asem Yihad.

Bagdad exportó 91,141 millones de barriles de petróleo en diciembre, es decir, un promedio de 2,94 millones de barriles diarios, lo que supone el promedio diario más alto desde 1980, dijo el portavoz.
Irak, miembro de la OPEP, es sumamente dependiente de sus exportaciones de petróleo y trata de aumentar sus ventas para financiar la reconstrucción de sus infraestructuras, afectadas por más de diez años de violencia desde la invasión estadounidense de 2003.
Sus ingresos se ven afectados por la caída de los precios del crudo, que rondan los 55 dólares por barril, cuando el presupuesto de Irak, uno de los principales países productores del mundo, depende en un 90% del petróleo.
Las exportaciones en diciembre fueron las más altas del último año, según Yihad, pero los ingresos fueron únicamente de 5.247 millones de dólares, en baja comparado con los meses anteriores debido al hundimiento de los precios del crudo.
Según el portavoz, estos ingresos se establecieron en diciembre en base a 57 dólares por barril, contra 100 dólares o más durante la primera mitad del año que acaba de terminar. "Los precios caen a un nivel anormal y ha llegado la hora de que la OPEP actúe para enderezarlos", declaró Yihad.
El Ministerio del Petróleo indicó en noviembre que la caída de los precios había "afectado mucho" a la economía de Irak, donde los ingresos presupuestarios estimativos cayeron un 27% a lo largo de 2014.