domingo, 6 de enero de 2019

Los hijos de migrantes solteras viven escondidos en Dubai

DUBÁI.- En Emiratos Árabes Unidos, las relaciones sexuales fuera del matrimonio se castigan con penas de cárcel. Muchas trabajadoras migrantes se ven forzadas a mantener encerrados a sus bebés.

Aproximadamente el 70% de los 9,4 millones de habitantes de Emiratos Árabes Unidos está compuesto por trabajadores migrantes mal pagados. Son una parte vital de la economía y, por lo general, trabajan en la construcción, en el comercio minorista, o como taxistas y sirvientes.
En Emiratos, la legislación que prohíbe el sexo fuera del matrimonio se conoce como ley Zina y se suele aplicar de forma rigurosa. En algunos casos, las autoridades han llegado a considerar las violaciones como sexo ilícito, encarcelando a sus víctimas. Si un médico de Emiratos diagnostica un embarazo en una mujer soltera, está obligado a denunciarla ante la policía, que entonces puede  encarcelarla o deportarla.
Antes de que el embarazo se haga visible, hay mujeres que optan por irse de Emiratos. Los abortos clandestinos también son comunes.
De acuerdo con las estimaciones del Consulado de Filipinas en Dubai, varios cientos de trabajadoras migrantes toman la misma decisión que Neng cada año: esconderse tras un embarazo fuera del matrimonio. 
“Temen perder sus trabajos porque son el único medio que tienen de mantener a su familia en Filipinas; para ellas, la deportación es como el final de sus vidas”, explica Barney Almazar, abogado del despacho Gulf Law, especializado en asistir legalmente a los trabajadores migrantes en Emiratos.
Por el temor de que la policía las detenga, o de no poder cuidar de sus hijos mientras trabajan, muchas de estas madres solteras se ven forzadas a dejar a sus bebés en manos de otros miembros de la comunidad, que se ocupan de ellos.
Las instalaciones para niños y bebés de las prisiones de Dubai están ahora mismo llenas. Muchas madres han decidido entregarse para poder dejar el país una vez cumplida su condena de cárcel, lo que según el portavoz del consulado está haciendo que se acumulen los casos.
Pero hay signos de esperanza para estas familias. La  Fundación de Dubai para Mujeres y Niños es un refugio gubernamental y organización de beneficiencia que ayuda a restablecerse a las víctimas de trata, cuida a huérfanos y niños abandonados, y se ocupa cada año de “decenas” de madres que han tenido bebés fuera del matrimonio, dice Ghanima Hassan Al-Bahri, su directora de atención y servicios sociales.
Los tribunales se han mostrado flexibles en todos los casos en que la fundación ha intervenido, librando a la madre de la condena de cárcel. Al-Bahri confía en que ese enfoque se aplique de forma más general.
“No puedo hablar de la policía o de la fiscalía deteniendo a mujeres, no lo sé... Pero según nuestra experiencia en la fundación, no es así cada vez que una mujer nos llama”, dice. “Creo que hay espacio para mejorar... ¿Para qué meterlas en la cárcel?”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario